Pablo Echavarría, el árbitro que representa a la provincia de Córdoba en el Fútbol Argentino.
Actualmente se desempeña en los torneos de B Nacional, federales de AFA, Copa Argentina y alterna partidos en la máxima categoría del fútbol de nuestro país.
Nació en Puerto Belgrano, en las Islas Malvinas, vivió en Rio Turbio (Santa Cruz), en la ciudad de Córdoba y gran parte de su vida la pasó en la ciudad de Río Cuarto. Por eso decimos que es cordobés por adopción.
Foto: Prensa AFA. |
Sus comienzos en el arbitraje "no fueron comunes. Siempre uno arranca esta profesión por algún familiar. En mi caso fue para abaratar costos en un torneo que organizaban en la UTN. Fue totalmente al azar, arranqué sin saber mucho sobre el reglamento", nos cuenta en la entrevista.
Además de ser árbitro, Pablo es licenciado en Higiene y Seguridad, pero por los viajes y cursos que le demandan el arbitraje no está enfocado plenamente en sus estudios y tiene pensado retomar ese trabajo cuando se retire.
El comenzar en la ligas del interior, como la Liga Independiente de Fútbol, Liga de San Franciso, etc. (la provincia de Córdoba tiene 17 Ligas en el interior), "el árbitro cordobés saca una pequeña ventaja con respecto a los demas árbitros del país, ya que no es lo mismo dirigir sólo una o en pocas ligas, que dirigir en 17 diferentes". Las diferencias que hay entre dirigir la Liga Cordobesa, que dirigir un torneo federal o Primera B, es que "los jugadores ya son profesionales y tienen un contrato. Por eso se cuidan mas. En cambio en los amateurs hay mas protestas y los jugadores no piensan demasiado a la hora de reaccionar ante una expulsión o una protesta, por ejemplo"
"Cuando arrancás esta carrera, uno lo que espera es dirigir a Boca, River. Conocer esas canchas, ver los jugadores que normalmente vemos por tele. Pero siempre con el mismo profesionalismo y respeto. Lo que tiene la primera división es que te da más repercusión, hay muchas cámaras. El error tiene que ser mínimo a diferencia de otras categorías".
Dirigió Primera División, B Nacional, Torneos Federales y ligas provinciales. Es decir, pasó por todas las categorías que puede ofrecer el fútbol de nuestro país. Cuando le preguntamos por sus aspiraciones, si deseaba llegar a dirigir un Mundial, por ejemplo, Pablo nos comentó que lo máximo para un árbitro es convertirse en internacional. Dirigir un torneo continental o un Mundial. Pero se necesita tiempo. "Al principio queres hacer todo rápido pero a medida que vas dirigiendo te vas dando cuenta que necesitas, primero, afianzarte en la Liga en la que estas actualmente para despues poder ir escalando".
Actualmente pertenece al SADRA (Sindicato de Árbitros Deportivos de la República Argentina) y ya dirigió 13 partidos por Superliga Argentina, afianzandosé cada vez más en el torneo nacional mas importante. Y es uno de los grandes referentes de la Provincia de Córdoba en el arbitraje.
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